jueves, 26 de abril de 2012

Un cuento Indio para reflexionar.



Eran tiempos difíciles para el Poblado Ziux Pieles negros. La interminable guerra contra el hombre blanco lo había dejado sin cazadores. La comida escaseaba, y ya empezaban a enfermar los ancianos y niños.

Kira, esposa del Pequeño Búho, futuro Chaman de la tribu, viendo como sufría el poblado, tenía los ojos llorosos, por sus hijos y el poblado en general. Un día cuando ya no pudo contener las lágrimas recordó las palabras de su sabio marido: “En los momentos en que sientas, veas o creas que todo se precipita y que la única solución es lamentarse, haciendo que la llegada del precipicio se acelere es cuando tienes que encontrar en ti la capacidad para ser creativa, positiva y motivadora. De ese modo podrás encontrar solución a tu problema. Y recuerda toda persona encierra un ser con gran potencial, esperando a salir”

Siempre había escuchado que el bosque de los lamentos, era tan espeso que una noche allí te hace enfrentarte a tus mayores miedos. Casi por intuición un día cogió una manda, y algunos víveres y se adentró con gran muestra de valor en el corazón del mismo.

Despuñes de 5 noches en el bosque Kira volvió al poblado. Cuentan que desde entonces el poblado encontró el modo de alimentarse. Cuentan que la capacidad para vencer la crisis nació de esa hazaña.

 “Enfrentarte a tus mayores miedos es el camino para tener la capacidad de ser creativo y luchador en una época donde cada vez mas familias están en situación limite”

("Cuentos indios" de Pequeño Búho)


miércoles, 18 de abril de 2012

Tu rostro y los espejos.

Se dice que hace tiempo, en un pequeño y lejano pueblo, había una casa abandonada. Cierto día, un perrito buscando refugio del sol, logró meterse por un agujero de una de las puertas de dicha casa.

El perrito subió lentamente las viejas escaleras de madera. Al terminar de subirlas se encontró con una puerta semiabierta, lentamente se adentró al cuarto. Para su sorpr...esa se dió cuenta que dentro de ese cuarto había mil perritos más, observándolo tan fijamente como él los observaba a ellos. El perrito comenzó a mover la cola y a levantar sus orejas poco a poco. Los mil perritos hicieron lo mismo. Posteriormente sonrió y ladró alegremente a uno de ellos. El perrito se quedó sorprendido al ver que los mil perritos también le sonreían y ladraban alegremente con él. Cuando el perrito salió del cuarto se quedó pensando para sí mismo:
¡Qué lugar tan agradable. Voy a venir más seguido a visitarlo!

Tiempo después otro perrito callejero entró al mismo sitio y entró al mismo cuarto. Pero este perrito al ver a los otros mil perritos del cuarto, se sintió amenazado, ya que lo estaban mirando de una manera agresiva. Posteriormente empezó a gruñir, obviamente vió como los mil perritos le gruñían a él. Comenzó a ladrarles ferozmente y los otros mil perritos le ladraron también a él. Cuando este perrito salió del cuarto pensó:

¡Qué lugar tan horrible es este. Nunca más volveré a entrar aquí!

En el frente de dicha casa se encontraba un viejo letrero que decía: "La casa de los mil espejos."

Todos los rostros del mundo son espejos... Decide cuál rostro llevarás por dentro y ése será el que mostrarás. El reflejo de tus gestos y acciones es el que proyectas ante los demás.

"Las cosas más bellas del mundo no se ven ni se tocan, solo se sienten en el corazón."

-Autor desconocido

jueves, 12 de abril de 2012

Frases que incitan a la reflexión

"La vida no te está esperando en ninguna parte, te está sucediendo. No se  encuentra en el futuro como una meta que has de alcanzar, está aquí y ahora, en este mismo momento, en tu respirar, en la circulación de tu sangre, en el latir de tu corazón. Cualquier cosa que seas es tu vida y si te pones a buscar significados en otra parte, te la perderás"

"Muchas veces reconocemos los momentos importantes de la vida... cuando ya han pasado."

"Cuando nos encontramos en la dirección correcta, lo único que debemos hacer es seguir caminando"

"No puedo evitar que tropieces, solo puedo ofrecerte mi mano para que te sujetes y  no caigas... y en caso de que cayeras, sigo dándote mi mano para ayudarte  a levantar..."

"Nadie sabe lo que puede conseguir hasta que lo intenta"

"Si uno no sabe lo que busca, no valorará lo que encuentre"

"Cambia la forma de ver las cosas, y las cosas cambiarán de forma"

Aprendamos a valorar lo que tenemos antes de que sea demasiado tarde.

Una historia preciosa. Dedicada a todas esas personas que trabajan demasiado y apenas "tienen tiempo" para sus seres queridos. Una gran reflexión.

La flor

Había una joven muy rica que tenía de todo, un marido maravilloso, hijos perfectos, un empleo que le daba muchísimo bien, una familia unida. Lo extraño es que ella no conseguía conciliar todo eso, el trabajo y los quehaceres le ocu...paban todo el tiempo y a su vida siempre le faltaba algo en algún área.
Si el trabajo le consumía mucho tiempo ella lo quitaba de los hijos; si surgían problemas dejaba de lado al marido, y así, las personas que ella amaba eran siempre dejadas para después, hasta que un día su padre, un hombre muy sabio, le dio un regalo: una flor carísima y rarísima de la cual sólo había un ejemplar en todo el mundo.

Él le dijo: hija, esta flor te va a ayudar mucho más de lo que te imaginas. Tan sólo tendrás que regarla y podarla de vez en cuando y a veces conversar un poco con ella, y te dará a cambio ese perfume maravilloso y esas grandiosas flores. La joven quedó muy emocionada, a fin de cuentas la flor era de una belleza sin igual.

El tiempo fue pasando, los problemas surgieron, el trabajo consumía todo su tiempo y su vida, que continuaba confusa, no le permitía cuidar de la flor.

Ella llegaba a casa, la miraba y sus flores todavía estaban ahí, no mostraban señal de flaqueza o muerte, apenas estaban ahí, lindas y perfumadas. Entonces ella pasaba de largo. Hasta que un día, sin más ni menos, la flor murió. Ella llegó a casa y se llevó un susto. Estaba completamente muerta, sus raíz estaba reseca, sus flores caídas y sus hojas amarillas. La joven lloró mucho y contó a su padre lo que había ocurrido. Él entonces
respondió:

Ya me imaginaba que eso ocurriría y no te puedo dar otra flor porque no existe otra igual a esa, ella era única al igual que tus hijos, tu marido y tu familia. Todos son bendiciones que el Señor te dio, pero tú tienes que aprender a regarlos, podarlos y darles atención, pues al igual que la flor, los sentimientos también mueren.

Te acostumbraste a ver la flor siempre allí, siempre florida, siempre perfumada, y te olvidaste de cuidarla. ¡Cuida a las personas que amas!